Linares tuvo un importante pasado minero, y eso lo demuestran el gran número de construcciones que se encuentran al norte de la ciudad principalmente. Muchas son chimeneas, a veces están en medio del campo, aparentemente apartadas de todo. Otros están junto a carreteras y son más accesibles. Una de las veces que estuve por aquí me dieron una pequeña guía sobre la minería en Linares, que incluye varias rutas por los alrededores. Y eso he hecho hoy, seguir una de esas rutas.
La elección ha sido el camino PR-A 265, el Sendero Fundición La Tortilla. He dejado el coche en una de las últimas calles de la ciudad, en una zona que no conocía, pero de ahí sale un camino asfaltado que va hacia la fundición La Tortilla, posiblemente el complejo de edificios más importante del entorno. Pocos minutos después del inicio hay que cruzar la carretera A-312 por un paso elevado, y al otro lado me he encontrado con el primer problema: la señal que indica por donde va el camino no está a la vista de la salida del puente. Está junto a la salida, sí, pero mirando hacia el lado contrario del que uno va. Bueno, me he dado cuenta tras recorrer pocos metros en el sentido equivocado.
Alejándome de Linares
Primeras vistas de las minas
La torre de perdigones está inaccesible, un muro flanquea varios edificios, y hay que verla desde una distancia. Pero por la zona hay otros edificios en ruinas. Al pasar éste complejo parece que el camino va en una dirección, a partir de aquí ya es una pista de tierra, pero lo que hay que buscar es el paso por debajo de una antigua vía.
La torre de Perdigones
Después de andar entre escombreras, el camino transcurre entre olivos, por caminos que casi hay que intuir. La lógica llevaba en una dirección, ya que el camino más claro estaba marcado como que la ruta no seguía por ahí. Algún obstáculo, como que el curso de un arroyo se llevó parte del camino, y pude ver que iba por el sitio correcto.
Muchos olivos, edificios en ruinas al paso, otros a la distancia, hay bastante que ver. Y desviándose un poco hay más todavía, pero he preferido seguir el camino, pues iba contrarreloj antes de que me anocheciese. En la guía pone que la ruta son 8.7 km, dos horas y media, pero apretando el paso la he hecho en poco más de una hora y media. En otra visita a Linares buscaré otra ruta, pero a ser posible por la mañana para poder tomármelo con más calma.
Antigua vía del tren
Indicadores en el cruce de varias rutas
En el inicio de la vía verde, con mi sombra por medio
Acercándome a los olivos
Torre en una rotonda de Linares
La tarde anterior, circulando por la carretera de Guarromán, me encontré también con varias ruinas en un momento de luz interesante, así que paré a hacer algunas fotos más.
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