Guimarães

Estamos en semana santa, he querido aprovechar los 4 días festivos que tenemos para acercarme a Portugal, en concreto a la zona norte, y conocer algo más. Pero meteorológicamente no he acertado. Ya los pronósticos ponían lluvia a montones, y viniendo he tenido algún claro (al pasar Cáceres), pero por lo general ha sido gris y lluvia. Al menos al llegar a Guimarães no llovía, y algo he podido hacer.

Se dice que en Guimarães es donde nació Portugal, es un pueblo de ambiente medieval muy bien conservado. Acercándome al casco antiguo ya me he ido encontrando calles empedradas y con edificios curiosos, típicamente portugueses. Algunos de ellos abandonados, como no podía ser de otra forma, pero por lo general está todo en buen estado. Y una vez en el centro histórico, predominan las calles peatonales, unas plazas preciosas, y todo esto bordeado por la muralla. Hacia el norte, saliendo ya de las calles antiguas he llegado hasta el Paço dos Duques, un edificio de fachada algo sobria, pero encantadora, en una zona ajardinada con grandes árboles. La visita eran 5€, pero no la he hecho. En parte porque iba a ir un poco justo antes de que cerrase, y en parte porque me ha desanimado ver en la entrada una señal de que no permitían hacer fotos.

Y un poco más arriba del palacio estaba el castillo. No tiene gran cosa, aunque sí su encanto. Lo malo es que ya estaba empezando a lloverme, y con el paraguas no ha sido fácil hacer fotos. Así que tras un breve paseo me he encaminado hacia el coche y venido al hotel a acabar de pasar la tarde, peleándome con una wi-fi que no me acaba de funcionar, y al final no he podido subir nada en dos días. Ahora se me ha acumulado el trabajo.

Pero como siempre, prefiero mostrar fotos a contar las cosas, se me da algo mejor.

Una de las calles que hay acercándose al centro

Paço dos Duques

El castillo, junto al Paço