No he conseguido mantener lo de una crónica diaria del festival de cine. Ayer me incorporé al trabajo, tras dos días libres que me había cogido. Y entre recuperar cosas pendientes, luego el festival, y otras cosas en casa, no tuve tiempo de escribir nada. Así que hoy hago una entrada doble.
Empezando por el martes día 16, por la mañana hubo un par de pases para escuelas. Para los más jóvenes la película fue "Escuela de rock", y me habría gustado ver las reacciones de un público tan joven, pero no me pude quedar, tuve que hacer algunas cosas durante ese rato. Pero si la cosa fue como recuerdo a mi sobrino, que con 4 años recién cumplidos disfrutaba de algunos momentos de la película, entonces todo marchó sobre ruedas.
Luego crecieron, y vinieron alumnos ya adolescentes a ver "El club de los emperadores". Aquí sí que me quedé, no había visto la película, y tenía ganas de ver qué tal. La verdad es que es inevitable compararla con un ya clásico "El club de los poetas muertos": un colegio exclusivo para niños de clase alta, un profesor... Aunque luego el argumento sigue por otros caminos diferentes, aquí es el hijo de un senador quien entra nuevo al colegio, y es un rebelde que hace lo que siempre quiere. ¿Que aprende la lección y se convierte en mejor persona? Pues ahí estuvo la sorpresa.
De los espectadores, no fue mal del todo. Hubo mucho movimiento, muchas veces los profesores tenían que pedir silencio, e incluso hubo quien se tuvo que ir minutos antes del final. Pero espero que hubiese gente que disfrutase, que de estos tiene que salir la próxima generación de espectadores.
Pasando ya a la noche, estaba dedicada al cine extremeño. Primero la proyección de 4 cortos. El primero de ellos fue "Mercat", un día en un mercado de Barcelona (creo que era en el barrio de Gràcia), un repaso a los puestos y compradores, un pedazo de realidad muy agradable de ver. Por un lado, me alegró poder escuchar catalán fuera de allí (la mayoría de los diálogos eran en este idioma), pero por otro se puede ver que el futuro de estos mercados es difícil: salvo alguna excepción, tanto compradores como vendedores son gente mayor. Otra cosa que me ilusionó, que me hizo sonreir, fue la explicación de una señora octogenaria de como corría una carrera popular que conozco bien, "la cursa del Corte Inglés". Una carrera popular por las calles de Barcelona, alrededor de unos 12 km, y donde hay una participación masiva. Se ha llegado a superar los 100.000 participantes, aunque fue un récord a batir que desbordó a la organización. El caso es que he participado unas cuantas veces, y me ilusionó ver el recuerdo de otra persona.
El segundo corto, "Gentuza", fue realmente corto. Una presentación breve de personajes, una escena tipo western, y una conclusión. Breve pero alegre.
Los restantes, "Atardecer rojo" y "Verás" no me convencieron mucho, por lo que poco puedo comentar.
La noche siguió con la proyección de "Un novio para Yasmina", de Irene Cardona, con la participación de varios de los actores. Me quedé a la presentación, pues la película ya la había visto cuando se estrenó, y tenía que madrugar al día siguiente. Tan solo que a ver si en algún momento me dedico más a prestar atención a la gente sobre el escenario que a hacer fotos, pues poco puedo contar. Creo que al final hubo un coloquio, pero no estuve.
De la película, es agradable de ver, y siempre puede alegrar conocer los lugares y situaciones, sentirte identificado con lo que ves. Aunque Yasmina, una inmigrante marroquí, es quien da título a la película, no es la única que allí aparece, están las historias de otros personajes del pueblo, tanto autóctonos como inmigrantes.
Pasamos de día, y nos encontramos con "Déjame entrar", de Tomas Alfredson, una película para la que tenía las expectativas muy altas, pero bajaron. No es una película fantástica o de terror al uso. Casi diría más que era un drama con elementos fantásticos. Es decir, la historia es un drama, pero algunos personajes y situaciones son imposibles en un cine realista. Sobre estos, se ha escrito tanto y se han hecho tantas películas que no hace falta ni presentarlos, ya se supone al espectador conocido sobre el tema, así que pasa directamente a la historia. Me gustó la propuesta, no se centra en escenas espectaculares de efectos especiales, hay alguna que otra, y tampoco muestra de forma muy directa las escenas sangrientas. Ese aspecto lo vi muy positivo. Pero el conjunto de la película me falló. No sabría explicar el motivo, pero no me convenció mucho. Y eso que me gusta el género fantástico.
Y esta noche, cine político con "Il divo", la única película que no ha podido ser en versión original. Esto porque me lo han dicho, que aún no la he visto. Mañana ya contaré.
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